Diario de Greg relata las vivencias escolares, familiares y sociales de Greg Heffley, un niño que inicia la secundaria con una visión sarcástica y egoísta del mundo. Greg escribe en su diario (aunque insiste en que no es un «diario») lo que piensa de sus padres, sus amigos, sus profesores y sus problemas cotidianos, todo con un humor burlón y egocéntrico.
El humor se basa en la burla, el sarcasmo y el egoísmo del protagonista.
Greg es desconsiderado, competitivo, superficial y en ocasiones cruel, sin recibir consecuencias claras por su conducta.
Los padres, profesores y adultos son retratados como ingenuos, ridículos o fuera de lugar. El narrador (Greg) no los respeta ni los considera útiles. Se burla abiertamente de ellos.
El lenguaje insultante está presente, aunque no es obsceno. Las expresiones “memo”, “idiota” o “pringao” son frecuentes, y pueden ser normalizadas o imitadas por lectores jóvenes.
Las relaciones románticas son superficiales, pero refuerzan estereotipos de popularidad y belleza como base del interés amoroso.
Lenguaje malsonante: Presente de forma leve y humorística. Uso de palabras como “tonto”, “memo”, “pringao”, “idiota”. Aunque están contextualizadas en tono cómico, pueden ser imitadas por niños.
Hay situaciones de agresión entre hermanos y amigos, como empujones, gritos o amenazas (“te voy a dar”, “le voy a romper la cara”), pero siempre con estilo cómico y sin daño visible.
Diario de Greg 1 es un libro de lectura ágil y divertida, con gran atractivo para niños por su formato visual y tono irreverente. Sin embargo, su mensaje central transmite una visión inmadura, burlona y despectiva del entorno, que puede influir en actitudes si no es mediado por un adulto
